Abdominoplastia

La abdominoplastia, también conocida como «tummy tuck» en inglés, es un procedimiento quirúrgico que se realiza para mejorar la apariencia del abdomen al eliminar el exceso de piel y grasa, además de tensar los músculos abdominales.

Durante la cirugía, se realiza una incisión horizontal en la parte inferior del abdomen, generalmente justo por encima del área púbica. A través de esta incisión, se elimina el exceso de piel y grasa, posteriormente se tensan los músculos abdominales si es necesario. En algunos casos, también se puede realizar una liposucción para eliminar el exceso de grasa en el área abdominal.

El procedimiento se realiza bajo anestesia general y generalmente requiere una estancia hospitalaria de un día. La cirugía puede durar entre dos y tres horas, dependiendo de la extensión del tejido a resecar.

Después de la cirugía, es normal experimentar hinchazón, sensibilidad y molestias en el área abdominal. Se recomienda usar una faja de compresión durante 4 semanas para ayudar a reducir la hinchazón y evitar el acúmulo de seroma postquirúrgico.

La abdominoplastia puede ser una opción para personas que han perdido una cantidad significativa de peso (secuelas de obesidad mórbida), mujeres que han tenido múltiples embarazos (y presentan diástasis de rectos abdominales) o personas que tienen una flacidez abdominal debido al envejecimiento o factores genéticos. Es importante consultar con un Cirujano Plástico certificado para evaluar las opciones y riesgos asociados antes de tomar una decisión.